Cómo retener a los mejores talentos en la empresa
A grandes rasgos la gestión del talento se trata de cómo usted, como empresa, descubre, contrata y mantiene a la plantilla con las habilidades que necesita su organización para crecer y tener éxito.
El primer centro de atención de una buena gestión del talento es siempre la productividad. Por lo que es un punto importante a la hora de descubrir y alimentar el potencial dentro de su plantilla y fuera de la empresa, permitiendo su crecimiento y aprovechándolo para alcanzar el cambio y el crecimiento planificado.
El cambio y el crecimiento cambiará con los tiempos. Pero siempre debería estar centrado en predecir y alcanzar de forma estratégica áreas importantes de necesidad.
La habilidad de la gestión del talento reside en asegurar, sea cual sea el reto al que se enfrenta su empresa, que siempre habrá un talento para hacer frente a dicho reto y superarlo.
- Sepa quién es su talento – No cometa el error de pensar que todo su talento se encuentra en los niveles altos de gestión. Piense de forma más creativa. Extienda su definición de talento para incluir a aquellos con funciones de especialista y de trato con el cliente así como otros puestos de primera línea. Las organizaciones empiezan a darse cuenta de que las personas mejor situadas para hacer que la empresa avance no son aquellas que se encuentran en los puestos de gestión.
- Defina sus necesidades estratégicas – Evalúe en primer lugar sus necesidades estratégicas presentes y futuras, y luego busque a aquellos dentro y fuera de su organización con las habilidades clave para cubrir dichas necesidades.
- Hágale saber a su plantilla el tipo de talento que usted busca – Una vez definidos el talento que le falta, hágale saber a su plantilla las competencias y habilidades que usted necesita. Puede optar por permitir que sus empleados se nominen a sí mismos, a sus colegas o amigos para su cantera de talentos. Recuerde que si está realizando cualquier tipo de programa interno de recolocación entonces debe recompensar a sus empleados en consecuencia.
- Establecer métodos de evaluación – Identifique métodos fiables para la evaluación del talento y asegúrese de que las personas comprenden la forma en la que van a ser evaluados y cómo se usará la información para desarrollar sus carreras. Es crucial una buena retroalimentación en todas las evaluaciones y actividades de desarrollo.
- Hacer frente a los costes – Los costes de la gestión del talento deberían ser compensados e igualados por la cobertura de los huecos de talento y el logro de los objetivos estratégicos.
- La medición del éxito – Mientras que las funciones más tradicionales de recursos humanos miden el éxito por medio de la cantidad de personal contratado, la gestión del talento mide su éxito en función de su impacto general en la productividad. Su última medición es la del Retorno de la Inversión, que se mide por la razón de dinero invertido en la gestión del talento y el valor del aumento de ingresos.
Las personas con talento quieren trabajar en lugares donde les estimulen profesionalmente, les planteen nuevos retos, puedan crecer y aprender, y se le reconozcan sus esfuerzos.
Como norma general, siempre se marchan por falta de motivación, no por el hecho de que le vayan a pagar más en otro lugar. Convierta la gestión de talento en una parte principal de su estrategia y sus empleados con un alto potencial se quedarán y se convertirán en parte del éxito futuro de su organización.